A pesar de ser un dúplex, enfoqué las dos plantas como un sólo espacio, donde todas las partes son vividas y disfrutadas.

La sala de estar es una hermoso espacio donde toda la familia puede estar junta disfrutándolo, pero también donde cada uno tiene su propio espacio.

Creamos un oasis urbano contemporáneo con líneas sencillas y colores luminosos mezclados con materiales naturales y ricas texturas. Para dar privacidad al área privada, utilizamos las escaleras existentes para crear una “caja” que funcionara como barrera física, como espacio para la TV y para ubicar obras de arte.

Una fabulosa terraza en la segunda planta ayuda a expandir el potencial de la casa. Para hacerla muy cómoda y completamente independiente incluimos el bar, una barbacoa y una ducha. Dos grandes techos de aluminio, diseño exclusivo de Arquimsa, proveen resguardo del sol y la humedad de la capital peruana. Para hacer espacio a las columnas de estos dos porches, tuvimos que desplazar las barandillas del suelo a la pared baja que rodea el edificio. Las grandes y bellas macetas de la marca Lechuza nos ayudaron a dar privacidad a toda el área.